ADMINISTRACIÓN: CIENCIA, TEORÍA Y PRÁCTICA
Para administrar es necesario tener una precisa
conceptualización de la administración y el proceso administrativo. El éxito
del proceso de gestión administrativa depende sobre todo del tipo y calidad de
respuesta provocada en los trabajadores de la organización. Todos los gerentes
llevan a cabo las mismas funciones
básicas para obtener resultados, estableciendo un ambiente propio para
el desempeño eficaz y eficiente de las personas que trabajan juntas en grupos.
Para Koontz[1]
La administración es diseñar y mantener un ambiente un ambiente
en el que las personas, trabajando en trabajando en grupos, alcancen con
eficiencia metas seleccionadas.
La
administración como ciencia, técnica y arte
Administración
como ciencia: Identifica
causas y efectos de problemáticas que afectan el funcionamiento de las
organizaciones y establecen relaciones entre ellas. Emplea un conjunto de
conocimientos sistemáticos y cuenta con principios. Hace uso de la observación
y la medición para mejorar la efectividad.
Administración
como técnica: Utiliza
procedimientos y herramientas para cumplir con los objetivos y metas
propuestas. Quien desempeña funciones de administrador desarrolla sus
habilidades mediante el uso de técnicas basadas en conocimientos teóricos y
prácticos.
Administración
como arte: La
personalidad, creatividad, intuición y visión son aspectos que distinguen a los
buenos administradores de quienes no lo son. La habilidad para interactuar con
las personas, innovar y tomar decisiones bajo situaciones de riesgo, hacen de
la administración un arte.
La administración se aplica a todo tipo de
organizaciones y a los administradores en todos los niveles organizacionales, a
través de sus funciones:
La Administración ordena los esfuerzos. A
través de la administración los sucesos aparentemente aislados, la información
objetiva o creencias se unen y así se obtienen relaciones significativas. Estas
relaciones tienen injerencia en el problema inmediato, señalan los obstáculos
que deben vencerse en el futuro y ayuda a determinar la solución del problema.
Por
ello:
Nada suplanta a la administración
Ø Determina objetivos dignos y
cuidadosamente seleccionados.
Ø Utiliza con eficiencia los
recursos
Ø Aplica la planificación,
organización, dirección y control.
Es desde siempre y sobre todo en la actualidad:
El único camino posible para optimizar el funcionamiento de cualquier
empresa.
Recomendaciones
[1] Koontz, H. y
Weihrich, H. (2012) “Administración. Una perspectiva global y empresarial”. Mc.
Gran Hill. 14 ed. México. Parte 1: Capitulo I. http://cieu.com.ar/descargas/2017/administracion.pdf
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